Nuestra Historia - Un Llamado de Dios

Compartir
Papa Chilo’s Healing Hands nació de la obediencia a un llamado divino.
Después de años de trabajar en el mundo corporativo, comencé a sentir un mover en mi espíritu—uno que no podía ignorar. Dios me estaba llamando a dejar atrás la comodidad y la previsibilidad de mi carrera para entrar en algo más profundo, algo sagrado. Él me recordó los dones que ya había puesto en mí: el conocimiento generacional de las hierbas medicinales heredado de mi abuelo, Papa Chilo; el corazón para servir y cuidar a los demás; y lo más importante, una fe arraigada en Cristo.
En el lugar silencioso de la oración, Dios me dio una visión clara—y una Escritura que se convirtió en la base de todo lo que hacemos:
“Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas... para que en todo sea Dios glorificado por medio de Jesucristo.” —1 Pedro 4:10-11
Ese versículo encendió un fuego en mi corazón. Ya no se trataba solo de hacer remedios herbales—se trataba de usar estos dones dados por Dios para servir, sanar y glorificarlo a Él. Por eso, cada pomada, aceite y bálsamo que elaboramos es orado y creado con propósito. Somos simplemente vasos, administrando la sabiduría que nos dejó Papa Chilo y permitiendo que Dios obre a través de nuestras manos.
Desde que decidí dar este paso de fe, he visto a Dios abrir puertas de maneras que nunca imaginé. Él ha traído a personas a nuestras vidas que necesitaban sanidad—no solo física, sino también espiritual. A través de Papa Chilo’s Healing Hands y el grupo local de mujeres cristianas que Él me llamó a iniciar, he visto con mis propios ojos cómo Dios está usando esta misión para traer a Cristo de regreso a los negocios, las familias y las comunidades.
Esto no es solo un negocio—es un ministerio. Es nuestro legado, nuestra ofrenda y nuestro acto de adoración.